En esta ocasión hemos contado con la colaboración de la clase de cuarto y sexto con lo que la actividad ha sido más enriquecedora ya que hemos hecho más grupos y más heterogéneos donde los más grandes se han sentido importantes al hacer de lectores / docentes y los más pequeños se han sentido especiales al ver a sus compañeros y compañeras mayores leerles sus libros favoritos.
Lo primero fue organizar los grupos, mezclando alumnos de tercer ciclo con los de segundo primero e infantil.
Después los grupos buscaron la mejor ubicación. En esta ocasión tuvimos que buscar sombras ya que hacía un sol de justicia y eran las 12:30.
Como les habíamos indicado, los padrinos lectores leyeron entonando y enfatizando mucho para captar la atención de sus apadrinados.
Para comprobar el nivel de comprensión, de vez en cuando los padrinos les iban haciendo preguntas a sus apadrinados.
También era importante que los apadrinados fueran viendo las ilustraciones que acompañaban a los textos.
Otra novedad es que al terminar los niños y niñas de infantil le regalaron un marcapáginas hechos por ellos mismos a sus padrinos lectores en agradecimiento por haberles leído su cuento favorito.
En conclusión, todos los docentes que participamos terminamos muy satisfechos ya que todos los niños/as disfrutaron mucho de la actividad y sirvió para que los más pequeños se dieran cuenta de lo importante que es leer y que ellos/as podrán ser capaces de hacer lo mismo que sus compañeros/as mayores dentro de poco.
Es una actividad que recomiendo ponerla en práctica de vez en cuando ya que es muy fácil de llevar a cabo y los resultados que se obtienen son mayúsculos.
Cuando veo este tipo de actividades me gustaría estar en el cole otra vez. Ánimo lo hacéis muy bien.
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